Toda la educación, desde cierto punto debe ser moral para tener un  optimo desarrollo y aceptación dentro de la sociedad debido a que todas las culturas desde hace muchísimos años, se han guiado por estatutos morales que deben seguir los cuales les han permitido vivir y convivir en armonía.
En la educación no es diferente, la educación moral permite a los estudiantes desarrollar juicios morales y razonamientos que les permiten llevar a cabo actividades que favorecen su desarrollo positivo dentro del aula de estudio culminando en un aprendizaje efectivo que conlleva al estudiante a alcanzar sus metas de estudio y sus proyectos personales.
Los seres humanos como consecuencia de la educación y los valores inculcados por su familia y personas allegadas, desarrollan el sentido de la moralidad y lo aplican a sus labores cotidianas, adquieren también el valor de la justicia, la libertad y la igualdad que les permitirá respetar a las personas con las que viven su día a día incluyendo a sus compañeros de estudio, esto genera un ambiente de inclusión en el cual se permite que personas con características físicas, mentales y emocionales diferentes puedan convivir en un solo espacio generando en cada individuo la confianza necesaria para desenvolverse en el medio que le rodea.